Santo Domingo
Para Ramón Peña, scout internacional con más de 4 décadas de ejercicio profesional, la oficina del béisbol de Grandes Ligas en República Dominicana, no hace nada para detener el consumo de esteroides en los jóvenes que practican béisbol en el territorio nacional.
“La oficina de Grandes Ligas en el país no hace nada, la señora Alida, que sirve el café, es la única que vale la pena. Después de ahí no se hace nada para acabar con esto”.
Yerik Pérez, es el director de la oficina de béisbol de Grandes Ligas de República Dominicana.
Sus declaraciones fueron emitidas en el programa La Hora del Deporte, que se transmite los domingos de 11 de la mañana a 1 de la tarde por CDN Deportes.
Peña también dijo que Major League Baseball es culpable por formar los estándares de firma a nivel internacional a partir de los 15 y 16 años, sin embargo en los Estados Unidos, los jugadores del sistema secundario firman a los 17 y 18 años y en Junior College desde los 19 y 20 años.
Otra realidad negativa que ocurre en el país, según Ramón Peña, son los acuerdos verbales o apalabrados que se establecen con peloteros con 4 y 5 años antes de ser elegibles para firmar, comprometiendo a un niño de 12 o 13 años al profesionalismo.
“Si hay scouts dándoles seguimiento a estos niños es porque las organizaciones así lo piden. No sólo los entrenadores son culpables de esto, porque si las Grandes Ligas quieren un pelotero de 15 años que pueda conectar jonrones a 450 pies, los entrenadores harán todo lo posible para conseguirlo y por esto comienzan a inyectarlos y los sacan de las escuelas”.
Además indicó que actualmente en el país la mayoría de los scouts son “busca vidas”, porque no les importa el desarrollo del jugador y solamente buscan beneficios económicos y que los scouts con los perfiles de Eppy Guerrero, Rafael Ávila, Ramón –Pintacora- de los Santos y Quique Acevedo no volveran a verse.
Antecedentes
Para Peña, el flagelo de las sustancias prohibidas siempre ha estado presente en el béisbol de Grandes Ligas y asume que su uso comenzó a incrementarse en la década de los 80, con el equipo de los Vigilantes de Texas.
“Para mí, los Vigilantes de Texas fueron el primer equipo que comenzó con el consumo de los esteroides a finales de la década de los 80 y principios de los 90”.
Peña citó a los peloteros Rubén Sierra, Julio César Franco, Dean Palmer, Sammy Sosa, Iván Rodríguez, por el cambio brusco de su físico en un lapso corto de tiempo y por supuesto consumo de sustancias prohibidas.
Así mismo aseguró que los distintos programas de béisbol inducen a los peloteros a consumir anabólicos con el objetivo de ser más atractivos y tener mejores oportunidades de firma para el béisbol organizado.
